EL ESPÍRITU DEL VINO I

En este nuevo análisis de Clasicazos, desmenuzaré El Espíritu del Vino de Héroes del Silencio, para mí y para muchos el mejor trabajo de la banda y uno de los discos más vendidos en España en los noventa. Para no perder la costumbre analizaré canción a canción, la mejor manera de entender este trabajo. Recorreremos juntos el camino a lo largo del álbum hasta lo más profundo de sus letras y veremos reseñas a clásicos y alguna que otra delicia.

Para este análisis es muy importante el antes y el durante, ya que este fue el tercer trabajo de Héroes, no fue una casualidad ni una inspiración pura. Fue la desembocadura de los anteriores trabajos, sobre todo de Senderos de Traición (1990). Con este álbum, la banda tuvo una evolución clara hasta Avalancha (1995), en parte provocada por la producción de Phil Manzanera.

Debido a la duración del trabajo lo publicaré en dos partes para una lectura y escucha más amena.

Con quince años me compré este disco en LP doble y así lo voy a comentar, cara a cara. Así le daré más solemnidad, espero no aburriros.

Para poder entender los temas os aconsejo que los escuchéis uno a uno leyendo el post y para ir al sitio donde los podéis escuchar pinchar encima de las canciones.

Portada de El espíritu del vino (1993)

Comenzamos con la cara A y nos encontramos el tema de presentación, "nuestros nombres", lanzado como sencillo en Mayo de 1993, aún faltaba un mes para la publicación del álbum. No podrían haber inaugurado mejor el álbum, esta canción define claramente lo que va a ser el trabajo, un disco complejo tanto en letras como en melodías. Como todas las canciones de Héroes ha sido protagonista sobre diferentes especulaciones por el sentido de la letra, pero todo lo tocado por ellos era muy complejo en lo que a letras se refiere. Conjeturas aparte, esta canción es el mejor desayuno para ir abriendo boca para el aperitivo hasta el plato fuerte. Una letra que invita al deseo sexual y lascivo hacia el trágico desenlace de un poema oscuro de cualquier poeta maldito del S.XIX. Una composición de Enrique Bunbury, pero como todos los temas de la banda fue atribuido a todos los miembros de la misma. Ya en este primer corte se nota la influencia en la producción de Phil Manzanera, ex guitarrista del grupo de rock progresivo Roxy Music.

El segundo corte, "tesoro", es una delicia de canción, muy corta para la longitud de las demás. Un tema muy pop, pero no deja de ser Héroes por la letra, la guitarra de Juan Valdivia y unos arreglos que invitan al rock progresivo y a la psicodelia. Un canto a la desesperación diría yo, pero no quiero ser de esos que lo quieren adivinar todo, me quedo con una frase de este estupendo tema, “ayer teñí de color sangre mis sueños”. Dejo que el lector se empape de la letra y haga sus propias conjeturas.

Seguimos con otro tema rockero, en este trabajo se puede ver la cara más salvaje del grupo, rock sin concesiones y letras incisivas criticando bajo poesía al Hombre en su máxima expresión. "Los placeres de la pobreza" es uno de los temas más marchosos del álbum. Guitarras desbocadas y voces desesperadas por ser escuchadas y así poder transmitir el mensaje de una canción magnífica tanto por la música y la letra, frenética desde el principio hasta el final. Desgranando un párrafo de la letra,  “ningún otro cielo en la tierra cruzó la cara al sí y al no dejando condena y cadenas del lado opuesto a la razón”, clara influencia de Nietzsche, el bien, el mal y el ser humano en medio de los dos, pero es mi opinión humilde al leer la letra. Y para acabar más frenéticos y locos por la embriaguez de este corte se permitieron acabarlo de sopetón pidiendo más y más y un leve “joder” se aprecia cuando el silencio se apodera tras finalizar el tema.

Acabando esta cara del LP se presenta "la herida", segundo sencillo publicado en Septiembre de 1993. Este tema recuerda a spanish caravan de The Doors por la parte lenta o acústica y luego repitiendo lo mismo hacen una parte rápida y dura. Bunbury claramente influenciado por la psicodelia, una constante en todo el álbum. La primera canción en la que Enrique tocó la harmónica como instrumento principal durante la parte acústica. Un tema épico y transcendental en la carrera de la banda por el éxito que obtuvo como sencillo y el vídeo musical grabado en el Teatro Principal de Zaragoza. Clara influencia de The Doors “siempre es la misma función, el mismo espectador, el mismo teatro”… Morrison se refería de forma similar a las actuaciones de The Doors. Una canción maravillosa en todos los sentidos, para algunos demasiado larga, pero los temas épicos son largos. Una letra inspiradora para pensar en las relaciones personales, la amistad es muy valiosa nos dice la herida al fin y al cabo.

Símbolos

Primera parada, vamos a darle la vuelta al disco, pero antes de seguir escuchando este trabajo maravilloso, centrémonos en la simbología del mismo. Sumerjámonos en la portada, de color rojo intenso, en el centro la calle Alfonso de Zaragoza distorsionada por una bola de cristal, rodeada de símbolos orientales bañados en rojo sangre. Una portada elaborada al igual que las canciones del mismo. Fueron muy importantes los símbolos, Héroes fue un grupo donde la iconografía era una constante, desde el emblema de la banda, una “S y una “H” superpuestas, hasta este trabajo donde los temas tienen cada uno su anagrama, todo estuvo muy cuidado y el diseño estuvo a cargo de Pedro Delgado, diseñador de portadas de discos.

Seguimos y empezamos la cara B, la aguja surca el vinilo y nos encontramos el primer corte, "la sirena varada". Una canción al más puro estilo Héroes, recuerda a sus primeras grabaciones, Héroes del Silencio (EP-1986)  y El mar no cesa (LP-1988), pero con una evolución muy clara respecto a sus inicios. Otra reminiscencia marina, e inspirada en la obra del asturiano Alejandro Casona llamada La sirena varada (1934), en la cual un grupo de personas decide vivir al margen de la sociedad, y el personaje de la sirena da un giro a los acontecimientos. En la canción, Enrique canta a la sirena a que vuelva al mar, dando más importancia a la imaginación que al sentido común. Este tema apareció como sencillo en Octubre del 93´ siendo uno de los estandartes del grupo y una de las canciones más aclamadas en directo. El vídeo clip se grabó en Villajoyosa (Alicante)  y en Talamanca del Jarama (Madrid). Dirigido por John Clayton, quien dirigió a Texas entre otros.

Siguiendo en la andadura, llegamos a una canción que marca la diferencia por la duración (es la más larga, con siete minutos) y por la estructura sombría de las melodías. "La apariencia no es sincera", un ritmo constante, machacón y muy suave en las estrofas, para llegar al estribillo, subidón muy comedido donde las guitarras y la voz suben para diferenciar claramente que están mandando un mensaje. Como todas o casi todas las canciones del grupo tiene tres partes, en este caso la tercera parte es un puente al estribillo hacia el solo de Juan Valdivia (guitarrista), y curiosamente esta parte es la que acaba la canción. La letra es de las más elaboradas del disco, no queda claro si habla de una mujer y un hombre o de la amistad entre ambos, o no.  De todas formas, lo importante es la ambigüedad y los sentimientos que desata al escucharla.

Llegamos a un punto donde la experimentación del grupo daba frutos, el tema "Z" es claro ejemplo, un melodía de 51 segundos de duración, en la que Juan Valdivia interpreta magistralmente la pieza de influencia country con una guitarra acústica, dejando clara su habilidad en el punteo con la mano derecha. Una licencia que se permitieron, para dejar patente su valentía y hacer también un guiño a los grupos clásicos como The Beatles que hicieron lo mismo en alguna ocasión, por ejemplo dig it (Let it be 1970).

Foto promocional del disco

"Culpable" es el siguiente tema, una declaración de intenciones del grupo o de su letrista, Enrique Bunbury. Dejando claro que es un hombre serio a pesar de su imagen rockera y oscura, dando claras explicaciones de quién es y sus preferencias intelectuales, la filosofía. Desaprender es en lo que hacen hincapié en una estrofa repitiéndola dos veces y dejando un vacío musical que invita a pensar, “y a lo aprendido en la escuela, me negaré… del todo”. El resto de la letra es un ejemplo de los excesos que rodeaban a la banda, las giras, el trabajo desmedido y todo lo que rodea un grupo de rock. Hay más en esta letra, un fondo que recuerda a "Baudelaire", sea así o no, la letra es magnífica. En cuanto a la música volvemos hacia el rock oscuro tan característico en sus comienzos, incluso me atrevo a escribir que veo influencias de The Cult, juzgar vosotros queridos lectores.

Tercera parada en este caminar por los surcos de esta obra. Aprovechamos el descanso para beber algo que contenga alcohol y fumar un cigarrillo.

Las giras fueron intensas y muy largas, recorriendo España, Alemania, Latinoamérica. Para los conciertos, debido a la complejidad de las canciones necesitaron un segundo guitarrista. Alan Boguslavsky fue el encargado de apoyar a Juan Valdivia con las seis cuerdas. Lo conocieron en Mexico D.F. y no dudó en apuntarse al proyecto.

Enrique Bunbury: voz principal, harmónica, guitarra acústica.

Juan Valdivia: guitarra principal y guitarra acústica.

Joaquín Cardiel: bajo y coros.

Pedro Andreu: batería.

Phil Manzanera: segundas guitarras.

Copi Corellano: pianos.

Producción: Phil Manzanera.

Jueves, uno de Agosto de dos mil trece.

Isla de Tenerife.

Pedro Molina.

Segunda parte, pincha aquí

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